Con danzas, mujeres emberas de Cuti recibieron sentencia
de restitución
Con cantos de la gobernadora indígena, María Guasarupa Domicó, y tres danzas en honor al agua, a los patos y al árbol de totumo, un grupo de mujeres celebró la entrega simbólica del territorio colectivo al pueblo Embera Katío de Cuti, en Unguía.
La ceremonia fue realizada para celebrar la decisión tomada, hace un par de meses, por los jueces que decidieron restituir los derechos territoriales y étnicos de la comunidad Embera del resguardo Cuti sobre 244 hectáreas.
Gracias al fallo, la comunidad podrá establecer con exactitud los linderos del territorio que, hasta el momento, viene compartiendo con el pueblo indígena de la etnia Tule.
Entre otras medidas, la población del resguardo Cuti será beneficiada con planes de siembra de diferentes cultivos que garanticen la seguridad alimentaria de la comunidad, así como programas de capacitación técnica y atención diferencial para la población infantil.
La sentencia resaltó las formas de resistencia de las mujeres de la comunidad que, en cabeza de María Guasarupa, quedaron solas en el territorio luego de que los hombres huyeron, entre 1997 y 2006, por las acciones de los grupos armados ilegales. El fallo también ordena la preservación del gobierno ginocéntrico (centrado en la mujer), que resistió en el territorio.
El resguardo está conformado por 9 familias (57 personas) que resistieron en el territorio, así como por otras 18 que fueron desplazadas forzadamente y se encuentran viviendo en el departamento de Córdoba; ellos están recuperando su territorio, sus tradiciones y su forma de vida.