Editorial
23 años de Chocó 7 días
El semanario Chocó 7 días llega hoy a la edición número 1177 y cumple el próximo martes 7 de agosto 23 años de existencia.
Inicio de una gran batalla fue el título del primer editorial, premonitorio de los grandes esfuerzos y sacrificios requeridos para superar los numerosos obstáculos que se interponen frente a la permanencia en el Chocó de un órgano semanal de comunicación independiente y crítico.
Logramos demostrar que en la actual época es posible producir y vender en el Chocó un semanario moderno y serio, con noticias y opiniones frescas de todos los rincones del departamento.
Derrotamos los pesimistas augurios de quienes apostaban que en el Chocó fracasaría el intento de un semanario que no estuviera supeditado a los intereses de los gobernantes y funcionarios de turno o que no se rebajara al más burdo e insulso sensacionalismo.
Abrimos caminos de expresión a las comunidades y colonias chocoanas, dentro y fuera del departamento, y organizamos una red de distribución que todos los viernes entrega una nueva edición con las últimas informaciones.
Pero estos triunfos tienen como soporte interno un draconiano manejo de la frágil economía de esta microempresa y el sacrificio continuo de los empleados y colaboradores de Chocó 7 días. Los primeros con salarios inferiores a su labor tesonera, muchas veces en horas nocturnas o en días festivos, y los segundos sin recibir un solo centavo por su invaluable aporte.
En 23 años de transmisión de aconteceres y de agitación permanente de ideas hemos recibido ataques previsibles que nos han ocasionado heridas llevaderas, que pronto han cicatrizado.
Pero el alma de Chocó 7 días nunca cesará de sangrar por el cobarde asesinato de Elacio Murillo Mosquera, nuestro corresponsal en Istmina, crimen todavía en la impunidad.
En tiempos de oscuridad y decadencia, las sociedades despiertan del letargo, cambian de mentalidad, crean una nueva cultura, aflora el interés crítico y la efervescencia ideológica, como preludio de la acción de masas constructora de una nueva historia.
El Chocó se desploma por el desbarrancadero de la corrupción, la insalubridad, el analfabetismo y el hambre.
En estos días aciagos, y como celebración de los 23 años, nuestro mejor propósito es mantener arriba nuestras banderas, seguir en la brega de crear opinión pública, de trabajar en el terreno de la contienda ideológica, para que Chocó 7 días sea un semillero del cambio y la transformación regional.