“Yo no comparto con negros”
Francisco Moreno Mosquera
El futbolista chocoano Jackson Martínez (bautizado así en honor a Michael Jackson), quien será recordado, entre otras cosas, por su deslumbrante actuación en el mundial de Brasil 2014, donde le marcó dos golazos a Japón, ostenta el récord de ser el máximo goleador colombiano en la Liga de Campeones de la UEFA, con 14 anotaciones.
Este talentoso chocoano también se ha distinguido por su disciplina, profunda religiosidad y comportamiento ejemplar dentro y fuera de las canchas.
Por eso no sorprende su reacción serena y aleccionadora cuando le tocó el infortunio de vérselas con un troglodita en el aeropuerto de Madrid Barajas, cuando viajaba hacia Oporto (Portugal).
Ocurrió que Jackson estaba quitándose los zapatos para pasar el control de emigración del aeropuerto y puso el celular en la bandeja que estaba más cercana a él. Entonces un hombre que venía detrás dijo que ya él había tomado dicha bandeja y que ésta era suya.
El guardia de seguridad dijo que podían compartirla.
“Yo no comparto con negros”, dijo el cavernícola de manera despectiva.
El chocoano sintió que le hirvió la sangre, cerró los puños y tuvo un impulso grandísimo; sin embargo hizo un esfuerzo sobrehumano para controlarse.
“Me vi en la cárcel”, dice, y agradece a Dios por haber conservado el autocontrol que en otro momento quizás no hubiera tenido.
Hoy luce tranquilo al recordar el triste episodio y da muestras de su espiritualidad al afirmar que su mejor decisión fue no haberse rebajado al nivel de quien lo ofendió pues, según sus palabras, “no nacimos para eso”.