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El poder paisa detrás de CorAtrato (II)

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José E. Mosquera Berrío

Es una iniciativa peligrosa para la unidad territorial de los chocoanos, porque después de la lucha de los cho­coanos con los pai­sas por Belén de Ba­jirá se les abre las puertas para que lo­gren el dominio del 80% territorio cho­coano y el control de su fuente de agua más importante.

Detrás de la propuesta de Coratrato se suman las fuerzas que han perpetrado los desplazamientos, exterminios, des­pojos de tierras y la minería ilegal (la mayoría controladas por paisas) en la región.

Igualmente detrás de la iniciativa tam­bién estará el grupo empresarial antio­queño que representan en Colombia a varias multinacionales mineras y que son el poder detrás del trono en la go­bernación de Luis Pérez.

Interesante recodar que la multinacio­nal Anglogold Ashanti Colombia, pro­pietaria con sus filiales de la gran mayo­ría de las concesiones mineras en el Cuenca del río Atrato, recolecto 6.120 firmas para respaldar a la gobernación de Antioquia en el litigio sobre Belén de Bajirá.

Una multinacional minera que han contado con apoyo político desde An­tioquia para obtener grandes concesio­nes mineras a lo largo de la Cuenca del río Atrato, quienes con sus poderes eco­nómicos pueden comprar a medio Con­greso de la República y crear una insti­tución de acuerdo con sus intereses eco­nómicos y estratégicos.

Es bueno recordar que mediante las alianzas política entre el ex congresista Odín Sánchez Montes de Oca, su her­mano el ex gobernador del Chocó, Pa­trocinio Sánchez con el bloque parami­litar “Elmer Cárdenas” que comandó Freddy Rendón Herrera, alias “el Ale­mán” controlaron ilegalmente el río Atrato.

Un hombre de origen antioqueño co­mo también lo fueron los hermanos Carlos y Vicente Castaño Gil.

Ellos controlaron ilegalmente el río Atrato, y detrás de ellos hubo un poder empresarial antioqueño que apoyo su maquinaria de guerra, los despojos de tierras y los exterminios de miles de campesinos de los pueblos ribereños del río Atrato.

Si se examinan los antecedentes sobre aquella alianza se concluye que la pro­puesta Astrid Sánchez es otra manera de entregarle el control de la Cuenca del río Atrato a las fuerzas políticas y empresa­riales antioqueñas.

En litigio sobre Bajirá quedo en claro los intereses estratégicos de Álvaro Uri­be y su combo de políticos y empresa­rios paisas en los territorios chocoanos que hacen parte de la Cuenca del río.

Los antecedentes de las alianzas de los Sánchez con los paramilitares y el famoso pacto de Singapur son eslabo­nes históricos que se deben tener pre­sente a la hora de examinar la creación de Coratrato.

No son hechos aislados sino conecta­dos entre el pasado y el presente.

@j15mosquera

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