¿Qué sabe usted del Chocó?
Por Edgar Hidalgo T.
¿Qué sabe usted sobre el poeta Hugo Salazar Valdés?
Hugo Salazar Valdés
Hugo Salazar Valdés nació en Condoto el 28 de febrero de 1922 y murió en Cali el 8 de febrero de 1977. Hizo estudios literarios en Popayán. Vivió en Cali, Pasto, Buga y Tuluá.
Durante algunos años se ganó la vida declamando a los poetas hispanoamericanos y recitando sus propios poemas.
Su obra canta al mar, a la selva y a sus pobladores negros. Obtuvo su primer éxito literario en 1948, cuando publicó Sol y lluvia y Carbones en el alba. A estos siguieron Dimensión de la tierra (1952), Casi la luz (1954), La patria convocada (1955),
El héroe cantado (1956), Toda la voz (1958), Pleamar (1975), Las raíces sonoras (1976) y Rostro iluminado del Chocó (1980).
Los poemarios de Salazar Valdés hablan del legado de la esclavitud, las prácticas religiosas, los bailes y la música que definen a los afrocolombianos del Pacífico, y destacan que el entorno en el que habitan forma parte integrante de esta identidad. Así, el Chocó es una presencia constante en la obra de Salazar Valdés: es la fuente de donde bebe su inspiración poética.
No obstante, Salazar Valdés no se detiene en una mera descripción idealizada del medio natural. Sus versos denuncian la explotación abusiva de los recursos que en el pasado trajeron fama y riqueza a esta región. Se convierten de este modo en un arma de lucha social con la que preservar el entorno en el que sobrevive el negro colombiano.
Fue subdirector de la Biblioteca Nacional y coordinó también la revista del Teatro Colón.
Sólo que en las lecturas la gente, como a los cantantes, le pedían su poema cumbre ‘La negra María Teresa’, el que le significó ingreso a la antología de los grandes poetas negros de América, junto a Nicolás Guillén, Langston Hughes, Jorge Artel, Emilio Ballagas.
Se casó en Quibdó con la maestra Alba Paz con quien tuvo dos hijas: Alba y Carmen Salazar Paz. Posteriormente se separa y en Quito se casa por lo civil con Rosa Amelia Idrobo Cajas. De este matrimonio nacen los hijos Gladys, Hugo y Jorge Salazar Idrobo. Su última compañera, Nelly López, educadora, compartió con él sus últimas creaciones literarias.