Los derechos del Atrato
Sentencia T-622 Nov. 10 de 2016 de la C.C.
César E. Díaz Hinestroza
Después de las festividades de navidad y año nuevo, sería bueno que las fuerzas vivas del Chocó se concentren en definir la hoja de ruta con el único interés de aprovechar de la mejor manera las herramientas y mandatos de la sentencia T-622 proferida por la Honorable Corte Constitucional el 10 de noviembre de 2016, que declara al río más importante del Chocó, el Atrato, ENTE SUJETO DE DERECHO, a la vez que señala acciones para “salvarlo” y responsable de sus ejecuciones.
Pero el tiempo transcurre y no se ven las acciones concretas para alcanzar los fines de la sentencia, salvo el proyecto de ley, que la representante a la cámara por la circunscripción electoral del Chocó, abogada Astrid Sánchez Montes de Oca, en el que se incluye la creación de la Corporación del Atrato, “Coratrato”, proyecto que se está socializando con todas las personas naturales y/o jurídicas que a bien quieran aportar sus conocimientos y/o experiencia.
Para ello, la doctora ASTRID viene realizando conversatorios dentro y fuera del Chocó. El titulado Río Atrato, ventana de oportunidades para el desarrollo y crecimiento socioeconomico del Chocó, se escenificara el 2 de febrero próximo en el auditorio de la biblioteca Arnoldo Palacios, del Centro Comercial El Caraño, de Quibdó.
Es esta la oportunidad para trasladar a ese foro, la polémica que se adelanta en las redes y prensas locales, para proponer y debatir, cómo aprovechar la herramienta que nos ofrece la Sentencia de la Corte Constitucional. El ejemplo y consecuencia de no aprovechar convenientemente esta herramienta, lo tenemos en la Ley 70 de 1993, llamada también Ley de negritudes, que aun, casi 26 años después, no se ha reglamentado en artículos fundamentales para negros, indígenas y raizales.
El llamado es a que se asista de manera constructiva, aportemos los insumos que le permitan a la parlamentaria defender un proyecto que contenga las aspiraciones y esperanzas del pueblo chocoano; pero asistamos y aportemos, no sea que mañana lloremos con dolor de patria, con la conciencia perturbada, porque por nuestra indiferencia ante los asuntos que verdaderamente nos interesan, nada hicimos, fuimos inferiores a nuestro deber hacer y entonces sí nos lamentamos.