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Bodas de oro
Encuentro con la biodiversidad

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Miguel Demetrio
Moya Córdoba

Se cumplieron las bodas de oro de los normalistas egresados en 1968, con ceremo­nia realizada en el au­la máxima de la Insti­tución Educativa Es­cuela Normal Supe­rior de Varones de Quibdó, presidida por el rector especialista Efraín García Serna, con la asistencia de 25 egresados de los 76 graduados. En la ceremonia estuvie­ron presentes:

-Ivonne Guisao Mosquera, Juan Emi­lio Hinestroza Torres, Jorge Isaac Mena Palacios, Alfonso Antonio Mosquera Cordoba, Félix Alirio Mosquera Mos­quera, Orlando Palacios Borja, Óscar Palomeque Moreno, Roberto Matías Perea Mosquera, Sixto Salas Cuesta, Luis Gorgonio Moreno Valencia, Nefta­lí Mosquera Murillo, Miguel Demetrio Moya Córdoba, Luis Omar Moya Va­lencia, Jorge Elías Mena Palacios, Salo­món Palacios Córdoba, Bertha Rentería De Londoño, Anilio Sánchez Moreno, Azael Sánchez Ramírez, Eduardo Pala­cios Ramírez, Luis Octavio Moreno Sánchez, Juan Tulio Córdoba Lemus, José Aristides Moreno Rentería, Farid Alfonso Díaz Mosquera, Rubén Darío Garcés Abadía, Miguel José Córdoba Copete.

Luego viajamos a Nuquí al encuentro con la biodiversidad y la majestuosa del Pacífico, vivimos la experiencia de co­nocer los bellos paisajes y el recorrido ambiental de la Ensenada de Utría, Pla­ya Blanca, las Aves, la Olímpica, Pan­guí, Coquí, Joví, Guachalito, Partadó y Arusí, termales, “aguas medicinales”.

Un paraíso terrenal, playas desconta­minadas, vegetación, aire puro, bellezas naturales que incitan a disfrutar de la na­turaleza y estimular el turismo nacional y extranjero. Estamos a solo a 15 minu­tos en vuelo aéreo para apreciar esa be­lleza natural en Nuquí “Bella Bonita”; vivimos la experiencia del desovadero de tortuga, ballenas, corales, ostras, me­ros, tamboreros, etc.

El parque natural de Utría tiene 54.300 hectáreas en los municipios de Nuquí, Alto Baudó, Bojayá y Bahía Solano abierto a la observación de la Biodiver­sidad. Esta experiencia nos permitió en­contrarnos con la biodiversidad y es muestra real que el Choco, tiene una re­gión natural para explotar el turismo na­cional e internacional.

Nuestros gobernantes deben prestar mayor atención a ese nuestro paraíso te­rrenal biodiverso que bien aprovechado fomenta muchos beneficios al turismo de esta nuestra bella región.

Agradecemos al profesor Siabat Cay­cedo Salas, quien fue nuestro guía en es­ta nueva experiencia de conocer las be­llezas del municipio de Nuquí y nuestra costa Pacífica chocoana.

Esta experiencia nos permitió tener una convivencia muy especial después de 50 años volvernos a encontrar para recordar nuestros especiales momentos de estudiantes y a conocer las nuevas vi­vencias que en este tiempo hemos lo­grado, además de recordar a nuestros profesores y nuestras anécdotas estu­diantiles.

Recordando que somos siempre maestros, viva por siempre la “Normal madre de los Institutores”.

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