Grandes sumas de dinero circularon sin control alguno de las autoridades en las horas previas a la jornada electoral del domingo y aún durante el desarrollo de la misma, cuando los chocoanos elegían sus representantes al Congreso de la República….
El día de las votaciones el comercio del voto se ejerció como cualquier otra actividad normal….
La llamada ley de la oferta y la demanda funcionó a la perfección. Quienes compraban votos discutían con sus eventuales vendedores el monto de la operación y entregaban, sin temor de ser reprimidos por las autoridades, el precio acordado por el ejercicio de este derecho, uno de los más preciados, que la Constitución tiene reservado a los ciudadanos…
Miles de chocoanos no supieron por quién votaron. Recibieron el valor acordado en la transacción de compra-venta y depositaron en la urna el voto por un número determinado en el tarjetón, que se le indicó al efectuarse el pago.
Ni un solo detenido, por supuesto….