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El Chocó de Ayer

De la edición 3028 del periódico ABC (Julio 15 de 1935)
Aviso: Se hace saber a los padres o acudientes de los alumnos becados por la Intendencia en los distintos colegios del país, que para presentar sus cuentas correspondientes a las pensiones que a éstos les fueron asignadas, deben acompañar los certificados de asistencia si cursan estudios profesionales; o asistencia y aprovechamiento si es el caso de estudios de bachillerato o algunos otros.


Como se presenta para los cobradores el inconveniente de la tardanza en la llegada de los tales documentos pueden solicitarlos con ocho (8) días de anticipación o telegráficamente. Sin este requisito no se visará cuenta alguna que a este artículo corresponda.
Director de Educación. Quibdó, julio 4 de 1935.


Declaraciones de Flórez Vergara. La carestía de la vida en el Chocó.
(De El Tiempo del 1º de julio)
Se halla en la ciudad nuestro distinguido amigo el doctor Eleázar Flórez Vergara, quien ejerce con alto espíritu de justicia, el juzgado superior del Chocó. Viejo amigo de esta casa, nos hemos acercado a saludarle y a pedirle sus impresiones sobre el Chocó, y sobre la situación del Valle, su tierra natal. El doctor Flórez Vergara nos concedió la siguiente interesante entrevista:


El Chocó es una tierra admirable. Desgraciadamente, apenas se le conoce como productor de oro y de platino en grande escala. Su importancia desde el punto de vista internacional es cosa en la que no se han detenido nuestros estadistas, no obstante que en la frontera con Panamá vive clavada, con fe y con entusiasmo, la bandera de la patria en los corazones de esos olvidados hermanos nuestros.


El reciente viaje del señor Presidente de la República, de su Ministro de Gobierno, de varios funcionarios del Estado, y de prominentes personajes de la política nacional por tierras chocoanas, ha trocado el pesimismo de los habitantes de la intendencia en fervorosa esperanza para el porvenir y los decretos ejecutivos sobre iniciación de las vías carreteables que han de poner en contacto a ese territorio nacional con el corazón de la patria, han abierto las compuertas de la fe, despertado la confianza y hecho renacer la esperanza de los ochenta mil ciudadanos que pueblan esas selvas maravillosas.


Es urgente para el gobierno del doctor Alfonso López Pumarejo, aliviar la situación de los compatriotas del Chocó que hoy pagan a precios increíbles el derecho de vivir. El país no puede encogerse de hombros ante la desgracia de un pueblo que paga un crecido tributo al comercio de Cartagena por la importación de artículos de primera necesidad, ni puede permanecer impasible cuando sepa que en el Chocó una libra de carne de mala calidad vale veinticinco centavos, que una libra de queso se cotiza generalmente a cuarenta centavos y que una botella de leche, revuelta con agua, tiene un precio permanente de veinte centavos.


La apertura de la carretera Quibdó-Bolívar, que ya se ha iniciado, con todo y no resolver el transcendental problema de las comunicaciones chocoanas, va a mejorar notablemente la situación de los habitantes del Chocó.


La irrigación de la energía antioqueña en territorio chocoano será fuente inagotable de riqueza para ambos pueblos y el intercambio de productos hará bajar el alto nivel de la vida chocoana que hoy alcanza el más exagerado del país. Servirá también para que esos compatriotas nuestros en cuyos corazones vibra un fervoroso amor por la patria, se sientan vinculados a ella por los lazos de los comunes intereses y de las mutuas conveniencias.


La unión del Chocó con el resto del país hará variar el concepto que allá alientan acerca de los locales intereses, y habrá un día en que en el Chocó no se tenga como extraño a quienes no vieron la primera luz de la vida al lado del San Juan y del Atrato, hermosos ríos por los cuales ha entrado la vida moderna conducida perezosamente al golpe del canalete y la palanca.


Don Emiliano Rey Barbosa
Por conocimiento que tenemos de fuente muy segura, sabemos que asistirá al senado de la República por el departamento del Valle, el gran amigo coterráneo don Emiliano Rey Barbosa. Este es justo regocijo para los que seguimos a los hombres por sus merecimientos, esta exaltación del amigo y motivos de gratitud de los chocoanos para aquel departamento, que ha sabido comprender y valorar en la que vale y pesa este distinguido coterráneo hijo de sus esfuerzos.


Don Emiliano Rey B., sin intrigas pequeñas y sin auto bombo, ha escalado las mejores posiciones políticas que brinda esta democracia a sus mejores servidores. Merecer pues, el amigo, que viva tranquilo riéndose de compasión de esta miseria humana, sin hacer caso a sus gratuitos enemigos.
El caso dado por Cali con elegir a Emiliano Rey Barbosa de senador es un vivo ejemplo de que ninguno en su tierra es profeta, y una demostración más, que nos indica que fuera de este ambiente pequeño, se reconocen con honradez los méritos y capacidades de cada persona.
Es lamentable y produce vergüenza a todo elemento sano y honrado, ver que en este ambiente no se sepa valorar a los hombres de valía que son orgullo para la tierra.


Acogemos estos triunfos del noble amigo como propios, porque no tenemos esas políticas vividoras, y los triunfos de los amigos nos fortalecen en alto grado.


Camilo Mayo C., Quibdó, julio de 1935.

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